Electrocardiograma
El electrocardiograma o EKG es el registro impreso de la actividad eléctrica del corazón. Nos proporciona datos como el ritmo cardíaco, las pulsaciones por minuto y la presencia de arritmias; además de que nos permite intuir otras afecciones cardíacas como crecimiento e hipertrofia de las cavidades cardíacas.
Es un estudio fundamental en la valoración del dolor torácico y en el diagnóstico del infarto al corazón.
Prueba de esfuerzo
A diferencia del Electrocardiograma en reposo, el Prueba de esfuerzo en banda sin fin (PE) o “treandmill” en ingles, nos permite valorar la capacidad del corazón para hacer esfuerzo a través de los cambios eléctricos que sufre el trazo de electrocardiograma.
Consiste en colocar electrodos en el pecho del paciente, parecidos a los que se usan en el EKG en reposo, por medio de los cuales se registra y graba la actividad eléctrica del corazón mientas el paciente realiza ejercicio cada vez de mayor intensidad sobre una caminadora. Esta prueba también se puede realizar sustituyendo la caminadora por una bicicleta especial llamada cicloergómetro.
La PE se usa principalmente para detectar pacientes que están en riesgo de presentar un infarto antes de que éste ocurra. Otras indicaciones para realizar una prueba de esfuerzo son: valorar la capacidad del paciente para hacer ejercicio, para iniciar un programa de rehabilitación cardiaca o ver la recuperación de un paciente después de que sufrió de un infarto.
Holter de 24 horas
El Holter es una técnica que nos permite grabar la actividad eléctrica del corazón durante todo el día conectando los electros del paciente a una grabadora portátil para después descargar esa información a un software de computadora.
El estudio es indoloro y es especialmente útil para identificar trastornos del ritmo como taquiarritmias (cuando el corazón late muy rápido) y diversos tipos de bloqueos cardiacos.
Monitoreo de presión de 24 horas (MAPA)
Similar al Holter, el monitor de 24 horas, el Monitoreo Ambulatorio de Presión Arterial (MAPA) permite medir la presión arterial del paciente en determinado intervalo de tiempo (cada 20 a 30 minutos) de forma automática quedando esta información guardada en una grabadora que el paciente carga en la cintura.
Esta técnica permite ser más preciso en el diagnóstico de los trastornos de la presión arterial; además que le permite al cardiólogo hacer ajustes en los medicamentos para el tratamiento de la presión, sobre todo en casos de difícil control.
Ecocardiograma transtoracico
El ecocardiograma es una técnica de imagen cardiaca ampliamente difundida que nos da un gran número de variables respecto a la función del corazón de forma no invasiva.
Consiste en un equipo de ultrasonido que es capaz de evaluar la función del corazón incluyendo su tamaño, su fuerza de contracción (llamada fracción de expulsión) y la integridad de las válvulas cardiacas, entre otros muchos parámetros.
Ecocardiograma transtoracico estrés con dobutamina / dipiridamol
El ecocardiograma estrés es una técnica que combina las imágenes del ecocardiograma convencional con la administración de medicamentos intravenosos con el objetivo simular situaciones de estrés físico y/o ejercicio en el corazón.
Muchas enfermedades cardiacas se hacen manifiestas cuando el corazón es exigido a bombear más sangre hacia el resto el cuerpo; aun cuando un corazón en reposo pudiera parecer normal es durante las pruebas de esfuerzo o estrés que un corazón enfermo puede ser revelado.
Ecocardiograma transesofágico
El ecocardiograma transesofágico es una técnica especial de imagen cardíaca en la cual el transductor (la parte del equipo que general la imagen) está montada sobre un endoscopio, el endoscopio llega hasta el estómago del paciente y desde ahí se toman las imágenes del corazón.
El estudio se realiza bajo sedación lo que permite el paciente no sufra de molestias. Las imágenes de eco transesofágico son excelentes para evaluar a detalle las válvulas del corazón o defectos cardíacos. También son de gran utilidad como apoyo cuando se realizan procedimientos avanzados como implante de dispositivos o remplazo percútanlo de válvulas cardíacas.
Marcapasos
Los marcapasos (MCP) cardíacos son dispositivos electrónicos capaces de monitorear la actividad eléctrica del corazón y en caso necesario asistir los latidos del paciente; algunas veces el MCP genera todos los latidos de una persona.
El marcapasos consiste en una carcasa de metal bio-compatible que contiene en su interior una batería y circuitos eléctricos con los algoritmos e instrucciones para su funcionamiento; el marcapasos se implanta dentro del cuerpo (generalmente en la parte superior del pecho). Este marcapasos se comunica con el corazón del paciente través de los “cables-electros”, estos cables transmiten la actividad eléctrica del corazón hacia el marcapasos para ser analizada y, dependiendo de la programación del marcapasos, éste utilizará estos mismos cables para transmitir un impulso eléctrico hasta el corazón para generar un latido. Al conjunto del MCP y los cables-electros se le llama sistema de estimulación cardíaca.
Existen diferentes marcas, modelos y tipos de sistemas de estimulación; dependiendo de las necesidades del paciente será el dispositivo a elegir para cada caso. Existen, además marcapasos con funciones especiales como desfibrilación automática y resincronización cardíaca.
De las preguntas más comunes respecto a los MPC es: ¿Cuándo dura un marcapasos? La respuesta sería que depende da necesidad que tenga el paciente de terapia de estimulación; es decir, aquel marcapasos que lleve el ritmo cardíaco del paciente durante el 100% del día durara menos que aquel que solo estimula el 60% del tiempo. Una vez que la pila del MCP se agota es necesario remplazar el dispositivo por uno nuevo. El tiempo promedio de duración de los marcapasos actuales ronda los 15 años de uso.
Cateterismo Cardiaco
El cateterismo cardiaco un procedimiento que le permite al Cardiólogo Intervencionista, a través de técnicas de rayos X, colocar pequeños tubos de plástico (catéteres) hasta el corazón. Estos catéteres permiten medir las presiones dentro del corazón para valorar su funcionalidad (Hemodinámica cardiaca) y través de estos mismos catéteres se pueden introducir dispositivos con el fin de resolver algún problema cardiaco (Intervencionismo cardiaco).
La gran ventaja de estos procedimientos es que no se requiere de cirugía abierta y todo se realiza a través de pequeñas incisiones en la piel de menos de un centímetro. En la actualidad los sitos de abordaje más utilizados son la arteria radial (brazo del paciente) y la arteria femoral (en la ingle).
Cateterismo Cardiaco Diagnostico
El cateterismo cardíaco diagnostico consiste en la inserción de catéteres en el corazón con la finalidad de confirmar o descartar algún problema cardíaco. Estos catéteres se pueden insertar en las cavidades derechas y/o izquierdas del corazón para medir las presiones de cada cavidad y las diferencias entre cada una (gradiente); con esto se pueden detectar malformaciones cardíacas o problemas valvulares.
Durante el cateterismo diagnostico se puede utilizar medio de contraste, el cual es un líquido que se inyecta dentro del cuerpo del paciente y nos permite visualizar estructuras a través de rayos X. Este contraste se puede inyectar dentro de las cavidades cardíacas para caracterizar mejor las malformaciones o problemas valvulares y también se inyecta dentro de las arterias coronarias para conocer su permeabilidad (si están ocluidas o no). Este procedimiento se limita a “conocer” o diagnosticar el problema cardíaco en cuestión; en los casos que así sean necesarios, se para a la fase de tratamiento, el intervencionismo cardíaco.
Cateterismo Intervencionista
Una vez confirmado el diagnostico, el intervencionismo cardíaco consiste en tratar de ofrecer una solución a la enfermedad encontrada. El ejemplo más significativo del intervencionismo cardíaco pudiera ser el infarto al corazón:
Durante un infarto cardíaco, alguna de las arterias que lleva sangre al propio corazón se ocluye; el cateterismo durante un infarto tiene un papel fundamental pues además de que confirma que la arteria esta ocluida (cateterismo diagnostico) ofrece la posibilidad de re-abrir la arteria causante del infarto restaurando el flujo de sangre que se había perdido (intervencionismo), esto ha hecho que el cateterismo cardíaco con intervencionismo coronario sea en la actualidad el “gold standard” en el tratamiento del infarto.
Para el intervencionismo coronario es necesario la utilización de guías intracoronarias las cuales con una especie de alambres metálicos muy delgados y flexibles que sirven con riel para sobre ellos avanzar los dispositivos que abrirán la arterial.
La arteria se logra destapar al inflar un balón colocado en el sitio de oclusión, a este procedimiento se le llama angioplastia con balón; una vez abierta, el intervencionista implanta dentro de la arteria en cuestión una endoprótesis llamada “stent coronario” que pareciera un pequeño resorte de metal y que funciona a manera de andamio para que la arteria no se cierre de nuevo. En la gran mayoría de los pacientes se requiere del implante de este “stent” ya que si no se hiciera de esa maneja al arterial se volvería a ocluir en un plazo promedio de 6 meses.
Las técnicas actuales permiten realizar intervencionismo cardíaco para tratar otras enfermedades como el tromboembolismo pulmonar; los defectos congénitos, el remplazo percutáneo del válvulas cardíacas (sin la necesidad de cirugía a corazón abierto).